La Ley 39/2006 es la Ley de Dependencia en Andalucía reconoce los derechos a los servicios y prestaciones económicas de las personas en situación de dependencia.

El 14 de diciembre de 2006 marcó un hito en el compromiso social y legislativo con la promoción de la autonomía personal y la atención a personas en situación de dependencia. La Ley 39/2006 no sólo reguló las condiciones básicas para este fin, sino que también estableció el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), un esfuerzo colaborativo entre diversas Administraciones Públicas.

Objetivos y principios de la Ley de dependencia en Andalucía

La Junta de Andalucía con la Ley 39/2006 tiene como objetivo prioritario reconocer un derecho subjetivo de ciudadanía: el derecho a la promoción de la autonomía personal y la atención a las personas en situación de dependencia. Este reconocimiento se materializa a través del SAAD, que busca garantizar y facilitar este derecho fundamental a todos los ciudadanos.

Los principios fundamentales que inspiran esta Ley son varios y significativos:

  • Carácter público: Las prestaciones ofrecidas por el Sistema son públicas, asegurando su accesibilidad y calidad.
  • Universalidad y No discriminación: Se garantiza el acceso igualitario a todas las personas en situación de dependencia, sin discriminación de ningún tipo.
  • Atención integral e integrada: La atención brindada es completa y coordinada, abordando todas las necesidades de las personas.
  • Valoración equitativa de necesidades: Se enfoca en una valoración justa para garantizar la igualdad real en la atención.
  • Participación activa: Involucra a las personas en situación de dependencia y a sus familias o representantes en el proceso de atención.
  • Permanencia en el entorno vital: Prioriza la permanencia de las personas en sus entornos habituales.
  • Cooperación interadministrativa: Fomenta la colaboración entre diferentes niveles de la administración pública.

Autonomía Personal y ABVD

La autonomía personal se define como la capacidad de tomar decisiones y controlar la propia vida según normas y preferencias individuales. Esto incluye la realización de Actividades Básicas de la Vida Diaria (ABVD), tales como el cuidado personal, tareas domésticas esenciales, y habilidades básicas de movilidad y orientación.

Además la ley también aborda los cuidados no profesionales, reconociendo la importancia de la atención prestada por familiares o personas del entorno del dependiente, no vinculadas a servicios profesionales.

Diferenciación entre dependencia y discapacidad

Es crucial distinguir entre dependencia y discapacidad. La dependencia se refiere a la necesidad de asistencia en actividades diarias, más allá de cualquier discapacidad que la persona pueda tener.

Dependencia en todos los grupos de edad

La dependencia no es una condición exclusiva de las personas mayores; afecta a individuos de todas las edades. La ley presta especial atención a los menores de tres años, con disposiciones específicas para garantizar su cuidado adecuado.

Atención especial a menores de 3 años

Para los menores de tres años en situación de dependencia, la Ley 39/2006 contempla ayudas específicas como asistencia domiciliaria y prestaciones económicas para cuidados en el entorno familiar. Además, se ha establecido una escala de valoración específica para esta franja de edad, regulada por el Real Decreto 174/2011.

Por lo tanto, la Ley 39/2006 representa un avance significativo en el compromiso con la dignidad, el respeto y la calidad de vida de todas las personas, especialmente aquellas en situación de dependencia, independientemente de su edad.

El Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) en Andalucía

El Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) es una red de utilización pública en Andalucía que integra de forma coordinada una variedad de centros, servicios, prestaciones económicas y ayudas. Su objetivo principal es promover la autonomía personal y proporcionar atención a personas en situación de dependencia.

Componentes del SAAD

El SAAD en Andalucía consta de varios tipos de centros y servicios, tanto públicos como privados:

  • Centros y servicios públicos de titularidad de la Junta de Andalucía y sus entidades dependientes.
  • Centros y servicios públicos de las Entidades Locales en Andalucía.
  • Centros y servicios privados concertados del tercer sector, según la Ley 38/2006.
  • Centros y servicios privados concertados con ánimo de lucro.

Todos los centros y servicios privados que colaboren con el SAAD deben estar acreditados conforme a la normativa de Andalucía.

Funciones y beneficios del SAAD

El SAAD garantiza condiciones básicas y contenido común del derecho a la promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia. Facilita la colaboración y participación de las Administraciones Públicas y optimiza los recursos disponibles, mejorando así las condiciones de vida de la ciudadanía.

Financiación del SAAD

La financiación del SAAD involucra varias fuentes:

  • Administración general del estado: Financia el nivel mínimo de protección para beneficiarios. La cantidad se fija anualmente en la Ley de Presupuestos Generales del Estado.
  • Comunidades autónomas: Aportan anualmente una cantidad igual o mayor a la del Estado. Pueden establecer un nivel adicional de protección con sus presupuestos.
  • Participación de beneficiarios: Las personas beneficiarias contribuyen a la financiación según su capacidad económica y el coste del servicio.

Además, la financiación del SAAD se estructura en varios niveles:

  • Nivel mínimo de protección: Fijado por el Estado, se garantiza una cantidad económica para cada beneficiario.
  • Nivel acordado de financiación: Depende de los convenios entre el Estado y las Comunidades Autónomas, aunque esta posibilidad está actualmente suspendida.
  • Nivel adicional de protección: Establecido por las Comunidades Autónomas con sus presupuestos disponibles.

Los beneficiarios del SAAD contribuyen económicamente en función del tipo y coste del servicio y de su capacidad económica, determinada por su renta y patrimonio. Esto asegura que ninguna persona quede excluida del sistema por falta de recursos económicos.

Por consiguiente, el SAAD en Andalucía representa un esfuerzo coordinado y multifacético para garantizar el derecho a la autonomía y atención adecuada a personas en situación de dependencia. Con su estructura inclusiva y financiación diversificada, el SAAD se posiciona como un sistema integral y accesible para mejorar la calidad de vida de este sector de la población.

Derecho a las prestaciones de dependencia: Requisitos y grados en el marco del SAAD

El Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) establece un marco de derechos para personas en situación de dependencia, tanto de nacionalidad española como extranjeras, siempre que cumplan con ciertos requisitos. Este sistema es fundamental para garantizar el acceso a las ayudas necesarias para una vida digna y autónoma.

Titulares de los Derechos

Los titulares de los derechos en el SAAD incluyen a personas de nacionalidad española y personas extranjeras en situación de dependencia que cumplan los requisitos establecidos. El sistema se extiende para asegurar que un amplio espectro de la población pueda beneficiarse de las prestaciones.

Requisitos básicos para beneficiarios

Para ser beneficiario del SAAD, se deben cumplir ciertos requisitos:

  • Estar en situación de dependencia en alguno de los grados establecidos.
  • Residencia en España: Es necesario residir en territorio español durante cinco años, de los cuales dos deben ser inmediatamente anteriores a la solicitud. Para menores de cinco años, se exige el periodo de residencia a quien ejerza la guarda y custodia.

Las personas emigrantes retornadas, deben probar su periodo de residencia de cinco años en otro país. Además, las personas extranjeras que cumplan con los requisitos y carezcan de la nacionalidad española tienen derechos amparados por la Ley Orgánica 4/2000. Esta ley establece que las personas extranjeras con residencia legal en España tendrán derecho a servicios y prestaciones sociales en las mismas condiciones que las personas de nacionalidad española.

Grados de dependencia según la Ley

La Ley de dependencia en Andalucía contempla tres grados diferentes:

  • Grado I (Dependencia Moderada): Necesidad de ayuda al menos una vez al día para actividades básicas de la vida diaria o apoyo intermitente para la autonomía personal.
  • Grado II (Dependencia Severa): Necesidad de ayuda dos o tres veces al día para actividades básicas, sin requerir apoyo permanente de un cuidador.
  • Grado III (Gran Dependencia): Necesidad de ayuda varias veces al día y apoyo continuo e indispensable debido a la pérdida total de autonomía física, mental, intelectual o sensorial.

El SAAD representa un esfuerzo significativo para abordar las necesidades de las personas en situación de dependencia en España. Al establecer criterios claros y equitativos para el acceso a las prestaciones, el sistema asegura que todos los individuos, independientemente de su origen o grado de dependencia, reciban el apoyo necesario para llevar una vida con dignidad y autonomía.