·       Considera que el PSOE de Andalucía oculta el logo en su
campaña porque «se avergüenzan de su historia, con dos presidentes
sentados en el banquillo de los acusados»

·       Reprocha al presidente del Gobierno que sea «muy duro con los
dictadores muertos y muy cobarde con los vivos»

·       Denuncia que el Gobierno permita «comportamientos totalitarios»
y pide la ilegalización de quienes «_escrachean_ a jueces y apalean a
policías en la calle»

·       «España no puede caer en la indignidad de permitir la
impunidad de quienes nos persiguen por las calles por un puñado de
votos para la moción de censura»

Pablo Casado

El presidente del Partido Popular, Pablo Casado,
ha criticado al presidente del Gobierno por tratar con rosas a
Puigdemont, a Torra y a Otegi, y «con puño» a los partidos
constitucionalistas, por haber votado en contra de la ley de símbolos,
la ley educativa o la ley que prohíbe los indultos a los golpistas.
«Eso es lo que hace el PSOE, puño contra el constitucionalismo», ha
enfatizado.

En un acto público que ha tenido lugar en Córdoba, Casado ha subrayado
la «excelente oportunidad» desaprovechada por el Consejo de Ministros de
ayer para decir qué opina sobre que la _kale borroka_ haya vuelto a
atacar una comisaría de la Policía Nacional en Cataluña o que la CUP
haya hecho un escrache en la casa de Pablo Llarena.

En este punto, ha señalado que en democracia la violencia «no es
admisible», por lo que «no puede ser que un gobierno de España se calle
en vez de decir que no va a tolerar este tipo de comportamientos
totalitarios», al  tiempo que ha vuelto a reclamar la ilegalización de
las juventudes de la CUP, que «_escrachean_, apalean a policías en la
calle, parten la nariz a mujeres que quitan lazos amarillos o vienen a
nuestras casas y sedes a intentar amedrentarnos».

«España no puede caer en la indignidad de permitir la impunidad de
aquellos que nos persiguen por las calles por un puñado de votos para
la moción de censura», ha enfatizado Pablo Casado, para instar a
continuación al presidente del Gobierno a que intervenga las cuentas de
la Generalitat y que éstas no dispongan de fondos para abrir embajadas,
crear el Consejo de la República o el Diplocat, así como que «se
aplique de una vez el artículo 155 y recuperar democracia, la dignidad
y la convivencia en Cataluña».

DURO CON LOS DICTADORES MUERTOS Y COBARDE CON LOS VIVOS

Sobre el desarrollo de la Cumbre Iberoamericana, Pablo Casado ha
criticado al presidente del Gobierno por ser «muy duro con los
dictadores muertos y muy cobarde con los vivos». A su juicio, la actitud
del presidente del Gobierno respecto a Venezuela y el hecho de no decir
«nada» al respecto de la situación que atraviesa este país es una
«vergüenza para España».

En este sentido, ha echado en falta que Sánchez hablara en Guatemala de
los dictadores «Maduro, Ortega o del sucesor de los Castro», en un marco
-el de las cumbres iberoamericanas- en el que otros ex presidentes como
Rajoy, Aznar o González habían desarrollado un buen papel para nuestro
país, al contrario que Rodríguez Zapatero.

Casado ha reiterado la necesidad de que el Gobierno de España diga
claramente que Venezuela es una dictadura, tal y como reclaman los
países pertenecientes al Grupo de Lima. «¿Dónde está España a la
hora de ir contra la dictadura de Maduro, por qué Sánchez no dice hoy
no dice que queremos acabar con un sátrapa que está machacando a su
población, matándola de hambre y echando a dos millones de venezolanos
fuera de su país?, se ha preguntado.

En su opinión, «Sánchez se parece a Zapatero por no querer criticar a
las dictaduras, presentar un presupuesto imposible y ruinoso y por
intentar reescribir nuestra historia y dividir a los españoles por su
moral, su religión y sus sentimientos más intrínsecos; y se parece a
Zapatero por estar rompiendo la unidad de los españoles, cediendo a los
chantajistas independentistas y a los proetarras».

“QUE SUSANA DÍAZ DEJE DE OCULTAR EL LOGO DEL PSOE”

Por otro lado, el presidente del PP ha pedido a Susana Díaz que deje de
ocultar el logo del PSOE en la campaña electoral andaluza, aunque ha
achacado esta situación a que «les da vergüenza lo que ha hecho el
PSOE en Andalucía, se avergüenzan de su historia, con dos presidentes
del PSOE sentados en el banquillo de los acusados por un caso que
alcanza los mil millones de euros».

Según el líder del PP, «el problema es que el logotipo sigue vivo, con
demasiados barones autonómicos con los que Susana Díaz no se quiere
encontrar», y ha subrayado que la candidata socialista «a lo mejor tiene
que explicar a los andaluces por qué su compañero de La Rioja quiere
imponer en euskera a los riojanos, por qué su compañera de Baleares
quiere segmentar a profesores o médicos dependiendo de que hablen
catalán; o por qué Ximo Puig quiere segmentar a los niños que quieren
aprender inglés solo si escogen el currículo de educación en
valenciano».

«A lo mejor tenía que explicar a los andaluces por qué quien más ha
insultado a Andalucía, el que se ha reído de los andaluces y ha
humillado a esta tierra, Quim Torra, manda en Sánchez, en el PSOE y en
el Gobierno», ha añadido Casado, para quien el presidente de la
Generalitat «va en la lista de Susana Díaz a Andalucía», por haber
votado la moción de censura para que Pedro Sánchez accediera a la
Presidencia del Gobierno.

Por ello, ha considerado que «no pueden más que echar la culpa a un
logotipo», usando «un puño fuerte contra los débiles y rosa con los
amigos de la Junta, los que reciben subvenciones, los de los fondos de
reptiles, cursos de formación y ERES», en definitiva, «rosa con los
amigotes clientelares que sostienen al socialismo y puño con las clases