•    Carmona a Adelante: «Nosotros tratamos de proteger a la gente honrada frente a su amparo de la delincuencia»

•    «La okupación provoca delincuencia; detrás de ellas hay mafias que se lucran con el dolor de otros»

•    «Hay que combatirlo mejorando la legislación; quienes ponen excusas son parte del problema»

El portavoz adjunto del Grupo Popular en el Parlamento de Andalucía, José Ramón Carmona, ha reprochado que PSOE y Adelante no apoyen la creación de una ley contra la okupación ilegal que garantice el derecho constitucional a la propiedad privada.

En una proposición no de ley presentada por los populares en el Parlamento, se pedía instar al Gobierno de la Nación a poner en marcha una ley que «combata eficazmente la okupación ilegal de viviendas y que refuerce las medidas actualmente existentes en el ordenamiento jurídico, tanto a nivel penal como administrativo y civil».

Carmona ha asegurado que éste es «un debate más necesario que nunca» porque los casos denunciados de okupaciones han aumentado este año en un 5% en el primer semestre respecto al año anterior, por lo que «es un problema que afecta a más de 80.000 familias que sufren la okupación ilegal de la vivienda que han trabajado toda su vida, algo a lo que no hay derecho».

«Nosotros protegemos a la gente honrada frente a actitudes como las que hemos visto de Adelante en este Pleno, donde se ha amparado la delincuencia», recordando el «daño irreparable» que supone para aquellas personas «que han pagada una hipoteca toda su vida y ven su casa okupada», además de los problemas que dicha okupación supone también para los vecinos del inmueble.

Carmona ha apuntado que la okupación «provoca delincuencia» y ha señalado que detrás de ellas «hay mafias que se lucran con el daño que provocan a otros», motivo por el que «hay que combatirlo mejorando la legislación». De lo contrario, «quienes ponen excusas son parte del problema».

«Este es un debate, por tanto, que va mucho más allá de ideologías; es una necesidad para proteger a las personas, en su mayoría trabajadoras, que ven cómo los okupas, además de ocupar las casas, se empadronan en ellas para recibir ayudas sociales y para que sus legítimos propietarios no los puedan echar».