El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, está siendo criticado en los medios de comunicación por el uso excesivo de su flota privada de aviones, Falcon y Airbus, en sus desplazamientos, incluso para trayectos de menos de media hora, lo que tiene un impacto significativo en el medio ambiente.

La web falcondespega.es, que recopila todos los viajes de los aviones VIP del Gobierno desde el 1 de marzo de 2021, muestra un total de 3.132 vuelos en los últimos dos años, lo que equivale a cuatro trayectos al día de media en las 790 jornadas contabilizadas. Los aviones VIP del Estado han emitido 55.507 toneladas de dióxido de carbono, lo que requeriría 130 parques como el Retiro madrileño y 19.000 árboles para absorber esas emisiones.

Las Islas Canarias y Andalucía han sido los destinos nacionales preferidos de la flota VIP del Estado, con 126 aterrizajes en las islas y 109 en alguna de las provincias andaluzas. Además, el Falcon ha sido utilizado para viajes internacionales a países como Bélgica, Portugal, Francia y Estados Unidos. El uso excesivo de la flota de aviones oficiales, que tiene un efecto significativo en el medio ambiente debido a su antigüedad, ha costado 17 millones de euros en combustible en los últimos dos años.

El Rey del CO2. El Falcon de Sánchez gastos lo mismo que un 5.000 años de un coche. Foto de la web falcondespega.es
El Falcon de Pedro Sánchez ha contaminado lo mismo que un coche que circulara durante 5.179 años

Falcon para todo

Es especialmente preocupante el hecho de que Sánchez haya utilizado su flota privada de aviones para desplazamientos cortos, como el viaje de menos de 45 minutos que realizó al parque natural de Doñana para criticar las políticas medioambientales del Partido Popular. Este viaje podría haberse realizado en línea regular, tren o automóvil, pero Sánchez eligió el Falcon, que emite la misma cantidad de CO2 cada 60 minutos de vuelo que un ciudadano europeo promedio en tres meses. El coste estimado de cada hora de vuelo del aparato es de 6.000 euros.

Este uso excesivo de la flota privada de aviones contrasta con la postura del Gobierno español en el tema del cambio climático y en un momento en el que la vida del ciudadano medio se ha visto muy encarecida. La contradicción entre las acciones y las palabras del Gobierno en materia de medio ambiente es alarmante y debería ser abordada para evitar un mayor daño al planeta y al presupuesto público.